Reseña "La fórmula preferida del profesor" de Yoko Ogawa

La fórmula preferida del profesor - Yoko Ogawa

Primera edición: 2008
Editorial: Funambulista
Número de páginas: 308

En esta historia se nos cuenta delicadamente la historia de una madre soltera que entra a trabajar como asistenta en casa de un viejo y huraño profesor de matemáticas que perdió en un accidente de coche la memoria (mejor dicho, la autonomía de su memoria, que sólo le dura 80 minutos). 

Apasionado por los números, el profesor se irá encariñando con la asistenta y su hijo de 10 años, al que bautiza «Root» («Raíz Cuadrada» en inglés) y con quien comparte la pasión por el béisbol, hasta que se fragua entre ellos una verdadera historia de amor, amistad y transmisión del saber, no sólo matemático… 

Como dice en su postfacio el profesor León González Sotos, «asistimos al emocionado ajetreo, de venerable filiación platónica, entre la anónima doméstica, el también —¿innombrable?— Profesor y el pupilo Root. Entre idas y venidas, tareas caseras y cuidados piadosos a su muy especial cliente, éste va desvelando las arcanas relaciones numéricas que los datos cotidianos más anodinos pueden encerrar.»

La formula preferida del profesor llegó a mis manos de casualidad, sin tener ni idea de que ya se había convertido en un fenómenos de ventas en todo el mundo. Y menos mal, porque tengo la manía de ir contracorriente y huir de los grandes éxitos de moda y, de haberlo hecho me habría perdido esta sencilla y maravillosa historia de tres personajes a los que es imposible no cogerles cariño.

La narradora de la historia es la asistente doméstica del profesor y madre de Root, apenas terminó la educación secundaria por lo que la historia está contada con una prosa sencilla y fácil de leer. La trama de la novela no va más allá del día a día en casa del catedrático. Dicho así, La fórmula preferida del profesor puede parecer poco atractiva pero nada más lejos de la realidad.

Entre sus páginas no encontraréis un gran misterio ni una apasionada historia de amor sino que el eje en torno al cual gira toda la novela son las matemáticas. Y eso es lo que más me ha gustado de La fórmula preferida del profesor: la forma en la que Yoko Ogawa introduce pinceladas y curiosidades matemáticas entre las páginas de la novela, sobre todo las relacionadas con la Teoría de los Números. Lejos de hacerse pesado, son "historias sobre números" de lo más interesantes y que sirven para comprender de la manera más sencilla conceptos que antes, por mucho que nos lo explicara nuestro profesor cuando íbamos al instituto, éramos incapaces de entender.

Será que las matemáticas siempre me han gustado pero no lo suficiente como para dedicarme a ellas y en este libro he encontrado una buena dosis de números combinados con mi otra pasión, la literatura; pero he disfrutado muchísimo los apenas tres días que me ha durado la lectura.

Por último, por si os interesa y queréis verla, aquí tenéis el enlace a la adaptación cinematográfica de la novela en V.O.S.E.

PD: ¿Alguien que haya leído el libro, entiende en qué se parece el símbolo de una raíz cuadrada a una cabeza plana? Aún no comprendo la razón por la que el profesor apodó "Root" al niño.